Cómo montar tu oficina para teletrabajar en casa

Si te estás planteando trabajar desde tu casa necesitarás tener tu propia oficina o despacho para poder hacerlo convenientemente.

Olvídate de pasar 8 horas con tu portátil sobre tu regazo sentado en la cama, tirado en el sofá o apoyado en la encimera de la cocina. El éxito en el teletrabajo viene dado principalmente por la organización del profesional y la comodidad que tenga en su espacio de trabajo.

A nadie escapa que el teletrabajo ofrece grandes ventajas, entre las que destaca la posibilidad de ser más productivo. Sin embargo, para que esta eficiencia pueda llegar a ser una realidad, se requiere que el lugar donde se va llevar a cabo cuente con unas condiciones mínimas.

En este post quiero compartir contigo varios de esos factores que deberías tener en cuenta para montar una oficina para teletrabajar en casa. Te daré algunas ideas, junto con ciertos aspectos que conviene considerar.

La ubicación

Todo trabajo requiere concentración. Por eso, debes situar la oficina en una zona tranquila, lejos del ruido de los niños y del exterior. Lo más recomendable es destinar un sitio de la casa que sea cerrado, un cuarto específico preferiblemente. De esta forma, podrás estar aislado de la contaminación acústica.

Las empresas de reformas y decoración de oficinas ofrecen diversas opciones para adecuar tu espacio de trabajo, insonorizar las paredes y convertirlo en un lugar privado.

La idea es bloquear completamente los ruidos procedentes del exterior para que puedas concentrarte y rendir en el trabajo. El objetivo es que olvides que estás en tu vivienda y mentalmente te sientas en una empresa. Ten en cuenta que en tu casa podrías llegar a tener una mayor tendencia a la procrastinación.

Los colores y la iluminación

Pinta la oficina para el teletrabajo de colores pastel, preferiblemente tonos fríos como azul, lila o verde. El simple hecho de elegir bien el color de las paredes te ayudará a sentir calma y paz en momentos de estrés generados por la jornada laboral.

Otro aspecto importante es la luz del espacio, ya que hay procesos creativos que requieren mucha iluminación. Si tu trabajo está relacionado con el diseño necesitas luz suficiente para trabajar. Si eres redactor o programador, necesitas un equilibrio entre la luz del monitor y la luz de la oficina para proteger tu visión.

Por otro lado, conviene contar con algo de iluminación natural.

Una ventana es siempre tu mejor opción. No sólo te proporciona claridad, sino que además te permitirá ventilar la habitación de vez en cuando y dejar que te dé un poco la luz de sol, vital para generar la vitamina D, tan importante para nuestro organismo.

Pero no vale que la ventana esté situada en cualquier lugar.

Si la tienes delante de ti, seguramente te deslumbrará. Por el contrario, cuando está a tus espaldas, la luz puede reflejarse en la pantalla del ordenador e impedirte una correcta visualización.

Por eso, lo ideal es que la ventana se encuentre en un lateral del escritorio y, a poder ser, en el lado contrario a la mano que usamos para escribir. De este modo, evitaremos sombras innecesarias cuando anotamos algo o dibujamos sobre un papel.

La decoración

El minimalismo no pasa de moda y, en el espacio de trabajo, sus ventajas son muy aprovechables. Una oficina minimalista favorece la concentración y, según expertos, produce una sensación de orden mental. Por su parte, un espacio recargado de objetos y elementos tiende a producir estrés y conflictos.

Por lo tanto, para la decoración de una oficina en casa te recomiendo usar lo estrictamente necesario. Un solo cuadro basta para darle un toque artístico al lugar.

Las plantas son aconsejables, pero no en exceso. Una plantita de la familia de las suculentas en un rincón, es más que suficiente para armonizar la oficina y aportar oxígeno al ambiente.

La variedad más conocida de este tipo de plantas es el Aloe Vera. No necesitan riego ni cuidado excesivo, requieren poca luz solar y no crecen demasiado, por lo que son ideales para tu lugar de trabajo.

Además, según el Feng Shui las suculentas son recomendadas para equilibrar las energías. ¿Qué más se les puede pedir?

Los muebles

Es importante elegir un buen mobiliario para tu oficina de teletrabajo. Vas a pasar muchas horas en ese lugar y, por lo tanto, necesitarás muebles prácticos y robustos.

Selecciona una mesa de escritorio cómoda que te ofrezca espacio suficiente para usar el ordenador y a la vez te sirva para hacer anotaciones en papel sin moverte del lugar. Elige un modelo amplio y con cajones para que tengas a mano cualquier material necesario. De esta manera, evitarás interrumpir la jornada para buscar aquello que te haga falta.

También necesitarás armarios y estanterías suficientes para almacenar todos los archivadores, libros y otros elementos propios de tu trabajo.

Y, por supuesto, no escatimes en una buena silla. Ten en cuenta que vas a pasar muchas horas sentado en ella.

Con ruedas o sin ruedas. Más o menos mullida. Con reposabrazos o sin ellos. Debes analizar qué es lo que más te conviene y buscar una silla que se adapte lo mejor posible a tu cuerpo y a tu posición.

La tecnología también es importante. Deberás contar con todos los dispositivos necesarios para realizar tu trabajo.

Y no te olvides de las conexiones. Los enchufes son imprescindibles en cualquier despacho. Deben estar situados de manera que sean perfectamente accesibles a la hora de conectar tus equipos.

Además, es conveniente tener un número suficiente de ellos para utilizar sin problema cualquier nuevo dispositivo que necesite electricidad. En mi opinión, en una oficina, siempre es mejor pasarse con el número de enchufes que quedarse corto.

El confort

Siempre es importante cuidar nuestra salud. Y cuando trabajamos no es una excepción. Tanto si lo hacemos en casa como fuera de ella.

Disponer de una silla ergonómica, cómoda, reclinable y acolchada puede marcar la diferencia entre ser productivo y no serlo. Es importante que cuides la salud de tu columna evitando malas posturas y desgaste en los discos intervertebrales.

Para ello es fundamental seleccionar la mejor silla de oficina y realizar moderadas pausas dentro de la jornada laboral para levantarte, caminar y estirarte.

Elige un monitor de calidad y colócalo en un nivel elevado para que evites bajar demasiado la cabeza. Esto minimizará los posibles daños en tu cuello y cervicales tras largas jornadas de teletrabajo.

Igualmente, es recomendable que protejas tu zona lumbar con la incorporación de cojines específicos para este fin. Junto a la cervical, esta parte de tu cuerpo representa el área más propensa a sufrir enfermedades ocupacionales de nuestra columna.

Ten muy en cuenta todos estos aspectos. Son esenciales para que puedas montar un rincón de trabajo en casa con el equipamiento necesario. Así no echarás de menos tu antigua oficina y podrás rendir al máximo.


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